La Parrala dicen que era de Moguer
Otros aseguran que nació en la Palma
Pero nadie pudo de cierto saber
De dónde sería Trini La Parrala
Las malas lenguas decían
Que las claritas del día
Siempre le daban bebiendo
Pero nadie comprendía
El porqué de la agonía
Que la estaba consumiendo
Unos decían que sí
Otros decían que no
Y pa dar más que decir
La Parrala así cantó:
Que sí, que sí, que sí, que sí
Que a La Parrala le gusta el vino
Que no, que no, que no, que no
Ni el aguardiente, ni el marrasquino
Que sí, que sí, que sí, que sí
Que si no bebe no pue cantar
Que no, que no, que no, que no
Que solo bebe por olvidar
¿Quién me compra este misterio?
Adivina, adivinanza
¿Por quién llora?, ¿por quién bebe?
¿por quién sufre La Parrala?
Dos hombres riñeron una madrugá
Dentro del colmado donde ella cantaba
Y el que cayó herido dijo al expirar:
—Por tu culpa ha sido, Trini La Parrala
Los jueces al otro día
A la Trini preguntaban
Si aquel hombre conocía
Y la Trini contestaba:
—Yo no lo he visto en mi vida
Ni sé por qué lo mataban
Unos dijeron que sí
Otros dijeron que no
Y pa dar más que decir
La Parrala así cantó:
Que sí, que sí, que sí, que sí
Que La Parrala tiene un amante
Que no, que no, que no, que no
Que ella no quiere más que a su cante