Gata Cattana
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Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
Gata Cattana
No aman de igual forma
los ricos y los pobres:
Los pobres aman con las manos.
Los pobres aman en la carne y con gula,
en las peores estampas,
en condiciones famélicas
y con todo en su contra.
Los pobres aman sin bonitos decorados.
Entienden de lunes y de tedios domingueros
y de gastos imprevistos, de facturas y de angustias
que embisten mes a mes, a quemarropa.
El amor de los pobres no sale por la ventana
aunque el dinero entre por la puerta
(que nunca entra)
(aunque no haya ventanas).
Los pobres han aprendido
a amarse a oscuras por lo mismo.
Han aprendido a amarse mal alimentados,
mal vestidos, malqueridos
porque el hambre agudiza el ingenio
y en sus jardines también crecen las flores
(aunque no haya jardines).
Los pobres han aprendido a aprovechar los vis a vis,
entre jornada y jornada de trabajo
(aunque no haya trabajo),
y saben darse placeres nunca tasados
de valor incalculable
y han aprendido a disfrutar las circunstancias
y la sopa de sobre,
el viejo colchón y la cuesta de enero.
Y parece que su amor se yergue
indestructible a pesar de,
a pesar de las miles de plagas,
de los sueños frustrados
y fracasos andantes,
de las crisis cíclicas
y de hambrunas
y de guerras,
más valiente que Heracles,
más Odiseo que Odiseo.
Y parece que su amor se extiende y se multiplica
al ritmo que se multiplican los pobres,
al ritmo que se multiplican los infortunios
y los desastres naturales que golpean
siempre en las casas de los pobres.
Y ese amor está a la altura de Urano,
a la altura de Urano y de Gea juntos,
y es el única arma que tienen los pobres
para defenderse.
Por eso han aprendido a cultivar flores
y a cantar bien sus penas
y han inventado las mejores obras
y los mejores instrumentos.
Por eso entienden de arte y saben
encontrarlo donde lo haya
aunque no lo haya
(que siempre lo hay).
Y han aprendido a aprovechar el carisma
y la jerga
y a escribir poemas inmortales
sobre amores complicados,
y saben de cosquillas,
y saben de boleros
y saben de desnudos
y de darlo todo
que no es más que lo puesto,
las manos y la lengua,
la forma de otear el horizonte
y los cánticos en contra del patrón.
Yo sólo sé amar de esta manera:
yo te amo como aman los pobres
y me temo
que durante mucho, mucho tiempo
esto seguirá siendo así.
Con Las Manos was written by Gata Cattana.