No te des por vencido, ni aun vencido
No te sientas esclavo, ni aun esclavo
Trémulo de pavor piénsate bravo
Y arremete feroz ya mal herido
Ten el tesón del clavo enmohecido
Que ya viejo y ruin vuelve a ser clavo
Y no la cobarde intrepidez del pavo
Que amaina su plumaje al primer ruido
Procede como Dios que nunca llora
O como Lucifer que nunca reza
O como el robledal cuya grandeza
Necesita del agua y no la implora
Que muerda y vocifere vengadora
Ya rodando en el polvo tu cabeza