Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
Edith Márquez
No renunciaré
A esa flor que tu me das cada mañana
A vivir conscientemente enamorada
A soñar juntos los dos de madrugada
No renunciaré
A la luz que tu me das si estoy a oscuras
A saber que esto es amor y no aventura
A encontrar limpio el camino de la duda
No renunciaré
Ni a tus ojos, ni a tus brazos ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza con que tu me haces querer
No renunciaré
Ni a tus ojos, ni a tus brazos ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza con que tu me haces querer
No renunciaré
A la luz que tu me das si estoy a oscuras
A saber que esto es amor y no aventura
A encontrar limpio el camino de la duda
No renunciaré
Yo sin ti sería un barco a la deriva
Una más de las que van por él perdidas
Y sin ti sentido no tendría mi vida
No renunciaré
Ni a tus ojos, ni a tus brazos ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza con que tu me haces querer
No renunciaré
Ni a tus ojos ni a tus brazos ni a tu boca
Ni a tu risa, ni a tu loco proceder
Ni a tus besos con los que me vuelvo loca
Ni a la fuerza con que tu me haces querer