Llora mi alma, mientras lo veo
Paseando por el centro de cualquier ciudad
Donde aquel falso sueño
Se convierte en la turbia pesadilla
A la que un día partieron buscando
Lo que nunca tuvieron, lo que siempre contaron
Aquellos que volvieron
Cargados de historias y extraños consejos
Que nunca entendieron
Su techo en el cielo, su cama en el suelo
Y su angustia en la bolsa
Donde sumergen sus pulmones
Y su orgullo, dañado y repleto de miedo
Me quema...
Sécate las lágrimas me dice un niño
Cuando me ve llorar
Guárdate esas lágrimas, que mi consuelo
Aún está por llegar
Sécate las lágrimas las que no tengo
Las que hacen olvidar
Sécate las lágrimas, sécate las lágrimas
Largo camino y estrecho el estrecho
Donde se olvidan ilusiones que robaron
De gastadas revistas en sus noches de sueños
Que pasearon por la furia de los mares
Y al llegar la perdieron
Libertad de sus actos, capital del consuelo
Florecer del dinero
Que recogen con la mente abandonada
Y su estela apagada
Aromas lejanos, nostalgias guardadas
Caricias bañadas
En la distancia que separa su familia
La que tanto ayudaba
Me quema...
Sécate las lágrimas me dice un niño...