Siempre pienso que me han engañado
Que algo tan pequeño no puede afectar así al cerebro
Pero ahora siento una sensación intensa, entre los oídos
A partir de ahora todo es distinto
He encerrado al diablo en esta caja y me he dormido
Cuando me despierto la veo sentada, sonriendo, sobre mi cama
Me mira dulcemente, me besa, y me abraza
De pronto siento que algo me está robando el alma
Con esfuerzo consigo separar sus labios de los míos
Logro separarme escupiendo sangre
El roce de su piel quema mi carne
Mira desde la cama, inocente, y asustada
La piel brillando casi con escamas
Y descubro un brillo endemoniado en su mirada
Veo claramente en ella el rostro de mi hermana
Vuelvo hacia la caja y siento un escalofrío al verla destapada
Cuando vuelvo la mirada no está ella, ya no hay nada
Sólo hay una risa que me hiela el alma
Algo muy difícil de explicar con palabras