Se esconde el sol y las sombras
Se admiran al ver resplandor
Cerca el final del desierto
De agua abriga traición
Desvivido, aturdido, asustado
No encuentra razón
Sólo espera que un soplo
De viento caliente el dolor
Un día más se desvían
Las mentes hacia otro lugar
Donde el placer se convierte
En nada para enloquecer
La tormenta de miedo
Agita las alas de un dios
Se estremece la angustia
Que reina en la soledad
Buscas paraisos de ensueños
De almas desconocidas
Que recuerdan la vida
Siembras de necesidad
Todo lo que dejas de lado
Intentando cambiar
Lejos de andar por el cauce
De un río que llega a crear
Olas que van recorriendo
Los días sin tregua que dar
Anidando en el árbol
Que oculta la sucia verdad
Recordando la flor marchitada
Que embriaga el amor
Tienes que abrir la despensa
De tu alma y de tu corazón
Para guardar los recuerdos que un día llegaste a encontrar
Hubo un tiempo en que el frío
Templaba los rayos de sol
Y una risa llenaba el vacío de tu interior