Cuatro cirios encendidos
Hacen guardia a un ataúd
Y en él se encuentra tendido
El cadáver de mi amor
Ay qué velorio tan frío
Qué soledad y dolor
Sólo están los cuatro cirios
También de luto vestidos
Igual que mi corazón
Como sombra vagarás
Y será tu maldición
Que nadie pueda quererte
Igual que te quise yo
Y tendrás que responder
Ante el tribunal de Dios
No se mata impunemente
Y tú mataste mi amor
A través de la montaña
Voy cargando mi ataúd
Y regaré con mi llanto
Una tumba y una cruz
Ay qué cortejo tan frío
Qué soledad y dolor
Sólo están los cuatro cirios
También de luto vestidos
Llorando en mi corazón
Como sombra vagarás
Y será tu maldición
Que nadie pueda quererte
Igual que te quise yo
Y tendrás que responder
Ante el tribunal de Dios
No se mata impunemente
Y tú mataste mi amor
No se mata impunemente
Y tú mataste mi amor