Uno se despide insensiblemente de pequeñas cosas
Lo mismo que un árbol en tiempos de otoño se quedan sin hojas
Al fin la tristeza es la muerte lenta de las simples cosas
Esas cosas simples que quedan doliendo en el corazón
Uno vuelve siempre a los viejos sitios en que amó la vida
Y entonces comprende como están de ausentes las cosas queridas
Por eso muchacho no partas ahora soñando el regreso
Que el amor es simple, y a las cosas simples las devora el tiempo
Demorate aquí, en la luz mayor de este mediodía
Donde encontrarás con el pan al sol la mesa tendida
Por eso muchacho no partas ahora soñando el regreso
Que el amor es simple, y a las cosas simples las devora el tiempo