Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Vicente Fernández
Rechiflao en mi tristeza, te evoco y veo que has sido
De mi pobre vida paria sólo una buena mujer
Tu presencia de bacana puso calor en mi nido
Fuiste buena, consecuente, y yo sé que me has querido
Como no quisiste a nadie, como no podrás querer
Se dio el juego de remanye cuando vos, pobre percanta
Gambeteabas la pobreza en la casa de pensión:
Hoy sos toda una bacana, la vida te ríe y canta
Los morlacos del otario los tirás a la marchanta
Como juega el gato maula con el misero ratón
Hoy tenés el mate lleno de infelices ilusiones
Te engrupieron los otarios, las amigas, el gavión
La milonga entre magnates con sus locas tentaciones
Donde triunfan y claudican milongueras pretensiones
Se te ha entrado muy adentro en el pobre corazón
Nada debo agradecerte, mano a mano hemos quedado
No me importa lo que has hecho, lo que hacés ni lo que harás;
Los favores recibidos creo habértelos pagado
Y si alguna deuda chica sin querer se había olvidado
En la cuenta del otario que tenés se la cargás
Mientras tanto, que tus triunfos, pobres triunfos pasajeros
Sean una larga fila de riquezas y placer;
Que el bacán que te acamala tenga pesos duraderos
Que te abrás en las paradas con cafishios milongueros
Y que digan los muchachos: “es una buena mujer”
Y mañana cuando seas deslocado mueble viejo
Y no tengas esperanzas en el pobre corazón
Si precisás una ayuda, si te hace falta un consejo
Acordate de este amigo que ha de jugarse el pellejo
P’ayudarte en lo que pueda cuando llegue la ocasión